domingo, 3 de enero de 2010

MUJER

Mujer, piel desnuda,
Tu vientre que es guarida de mis deseos
Mas inimaginables,
Se abren en esta noche de cruces
Y tu mujer,
desnudes de la noche,
Besas mi mirada
Terrena, azul y amarilla,
Eres tu quien se abre como un prado a mis ojos,
Y eres tu quien sueño y deseo,
Y por quien mis noches se hace un respiro
Y cada respiración tuya se vuelve
Contra las piedras,
Que aguardan entre las sabanas hechas de petalos de rosa,

Mujer de piel de cielo,
Este mar se desborda no solo deseo,
Sino, de amor
y se vuelve un pozo tan grande
Un pedazo de carne de bronce se transforma
En ti un pedazo de tendón tan tierno
Que a veces se vuelven aves,
Y hacen nacer la esperanza
En cada rectángulo mío,
Que es tuyo,

Mujer de piel de iglesia,
En tu piel hallo yo guarida y descanso
Mis palabras y mis deseos por ti,
En ese portón que se abre a tocarlos con mis manos
Hallo yo tu deseo y tu saliva,
Este amor que crece como crece la marea
Y como crecen las estrellas en el cielo, y
Ese amor marginal a tu ojos,
Se esconde detrás de cada una de tus casas,

Mujer, tus manos en esta noche
Van caminando en mi, y yo cerrandome
De deseo y de lluvia,
Cierro mi cuerpo y somos uno solo
Y al saltar la calle, y saltar tu cerca que bien
Guardabas tú detrás de ese castillo medieval
De tus deseos,
Yo trepe cada muro y cada muro era de carne,
Yo trepe cada piedra, cada sueño y eran de carne
Y saboree de cada hueso, cada luz y cada esquina
Y cada esquina, cada forma tuya eran de carne,
Y anduve en tu palacio reina mía,
Entre tus casas y cada casa,
Cada rincón de tu casa era de carne,
Y cada exploración, cada asomada mía tocaba las piedras de tus paredes,
Y era verano en tu cuerpo,
Y era de carne tus palabras
Y cada mano que se movía entre tus hebras castañas
Eran de agua.

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